Las úlceras del pie diabético son una complicación común que puede ocurrir por tener diabetes. Por lo general, se desarrollan en áreas del pie que experimentan traumatismos y presiones repetidamente. Si no se tratan, pueden provocar osteomielitis (infección de los huesos) del pie y amputación de las extremidades inferiores.

Las lesiones por presión suelen ser causadas por una presión prolongada sobre la piel y el tejido subyacente. Es posible que también haya escuchado que les dicen escaras. Aunque suelen afectar a quienes están confinados a la cama o sentados en una silla o silla de ruedas durante largos periodos de tiempo, pueden afectar a cualquier persona. 

Las úlceras por estasis venosa generalmente se desarrollan en el interior de la pierna, justo encima del tobillo. Pueden ocurrir cuando hubo alta presión en las venas de la pierna, generalmente como resultado de una lesión menor. 

Las úlceras arteriales pueden desarrollarse cuando hay falta de flujo sanguíneo a la piel del tobillo, los talones o los dedos de los pies. También puede escuchar que las denominan úlceras isquémicas o heridas isquémicas. Por lo general, son causadas por una enfermedad de las arterias periféricas, que es una reducción del flujo sanguíneo debido al estrechamiento de las arterias.

Las heridas causadas por enfermedades autoinmunes pueden resultar difíciles de identificar. Aunque son similares a las heridas en otras afecciones, es posible que se necesite una biopsia de tejido para identificar el curso de tratamiento correcto. Estas heridas requieren un enfoque de tratamiento multidisciplinario y pueden ocurrir como resultado de las siguientes enfermedades:
 

• Artritis
• Calcifilaxis
• Lupus
• Penfigoide
• Soriasis o artritis soriásica
• Pioderma gangrenoso
• Esclerodermia

Las heridas malignas suelen contener tejido que se irrita fácilmente o necrótico (muerto). Requieren un enfoque multidisciplinario y pueden ser difíciles de curar sin tratamiento sistémico o tratamiento de la causa (por ejemplo, cáncer).

Las heridas traumáticas suelen ser causadas por una lesión que resulta en un corte, laceración o punción, como pisar un clavo o cortarse el dedo con un cuchillo. 

Después de un procedimiento quirúrgico, es posible que tenga una herida que no cicatriza normalmente. Se trata de heridas quirúrgicas que no cicatrizan y una causa común es la infección en el sitio quirúrgico. Las condiciones médicas que causan una disminución de la función inmune, como la diabetes, pueden contribuir a que las heridas quirúrgicas no sanen.​​​​​​​

La radionecrosis de tejidos blandos es la muerte de los tejidos blandos que se produce como resultado de la exposición a la radiación. La radionecrosis de los tejidos blandos puede provocar una muerte extensa del tejido y provocar llagas abiertas en la piel. Este tipo de herida puede ocurrir meses o incluso años después del tratamiento con radiación ionizante.

El desbridamiento ayuda a preparar el lecho de la herida para la curación. Implica limpiar a fondo una herida y eliminar todo el tejido anormal, infectado y no viable, así como los restos extraños y el material residual del tejido y los vendajes.

Existen varios tipos de desbridamiento que se pueden utilizar para limpiar una herida. El método utilizado depende de la gravedad de la herida y de su respuesta a la curación:
 

• Desbridamiento autolítico (se utilizan vendajes que retienen la humedad y los mecanismos de defensa naturales del organismo)
• Desbridamiento enzimático (se aplica un gel o ungüento en el área infectada)
• Desbridamiento mecánico (se utiliza un agente como agua o gasa para limpiar o retirar el tejido muerto y/o infectado)
• Desbridamiento cortante (se corta el tejido no saludable)

Los sustitutos de la piel se utilizan para ayudar a regenerar el tejido perdido y reemplazar la herida con piel funcional. Tienen el potencial de estimular la curación de heridas crónicas y reducir la carga médica que crean estas heridas.  

Los vendajes avanzados para heridas regulan la superficie de la herida al retener la humedad o absorber el líquido. Mantener un buen equilibrio de humedad minimiza las molestias antes, durante y después de los cambios de vendaje y ayuda a la curación. Algunos vendajes se utilizan por sus propiedades antimicrobianas adicionales.

Los dispositivos reductores de presión pueden reducir o aliviar la presión y se clasifican en estáticos (que no se mueven) o dinámicos. Los dispositivos estáticos pueden incluir cosas como espuma, agua, gel y colchones de aire. Los dispositivos dinámicos utilizan una fuente de energía para redistribuir la presión localizada.   

La terapia de compresión se usa para tratar las úlceras venosas de las piernas. Se aplica presión externa, en forma de vendajes, medias u otros dispositivos, alrededor de la parte inferior de la pierna para ayudar al flujo de sangre desde las piernas hasta el corazón.